El Pincel que Desafió las Críticas: Sé Tú Mismo
- Aser Ones, LCSW
- 29 mar
- 1 Min. de lectura

En los años 20, Frida Kahlo, una joven mexicana con pinceles y dolores, empezó a pintar autorretratos que sangraban verdad. Cuando mostró sus primeras obras, las críticas la erian como lo haría un cuchillos afilados. “Son demasiado crudas,” decían los artistas de la élite. “Una mujer no debería pintar así,” opinaban los tradicionalistas. Incluso Diego Rivera, su futuro esposo, al principio dudó: “Es raro, no sé si venderá.”
Un crítico de la época, según reseñas en periódicos mexicanos, la llamó “amateur morbosa” por sus lienzos llenos de sufrimiento y color. Frida sintió el rechazo, pero no guardó sus pinceles. Con cada trazo, pintó su alma fracturada, vibrante y muy suya—. Esas obras “raras” hoy cuelgan en museos, y su nombre resuena como sinónimo de fuerza. Frida no dejó que las voces ajenas borraran su visión.
Las críticas de los demás son como sombras: pueden opacarte un momento, pero no definen tu luz. Preocuparte por ellas te aleja de tu esencia. Sin embargo, la voz más afilada suele ser la que llevas dentro. Estudios de la Universidad de Michigan revelan que hasta el 70% de nuestro diálogo interno puede ser igual o peor de negativo, susurrando “No eres bueno” o “Para qué intentarlo” mucho después de que los críticos se callen.
Frida venció porque escuchó su pasión, no sus miedos. Hoy, te invito a pintar tu propio lienzo: ignora el ruido externo, silencia al juez interno. Si necesitas ayuda para encontrar esa claridad, yo estoy aquí en Fenix Behavioral Health. ¡Tu pincel tiene más poder del que crees!
Aser Ones, LCSW
561-421-4132
Lo que se debe hacer … pintar de nuevo
Definitivamente la pura realidad, gracias!