El Puente al Éxito: Tres Claves que Cambian Todo
- Aser Ones, LCSW
- Apr 1
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En una aldea al pie de un río caudaloso, vivía Javier, un pescador joven con redes rotas y sueños grandes. Un anciano del pueblo, Don Miguel, le ofreció un trato: “Repara el puente viejo conmigo. Si obedeces mis instrucciones, serás el mejor pescador del valle.” Javier dudó —quería pescar, no construir—, pero aceptó. Don Miguel era estricto: “Clava los postes así, átalos firme, no te saltes pasos.”
Cada día, Javier llegaba al alba, sudando bajo el sol, siguiendo cada orden con disciplina aunque sus manos dolían. Las semanas pasaron, y los vecinos se burlaban: “¡Pescador de puentes, qué pérdida de tiempo!” Pero Javier persistió, constante como el río. Cuando el puente estuvo listo, Don Miguel sonrió: “Ahora cruza y lanza tu red desde el otro lado.” Javier obedeció y atrapó más peces en un día que en meses. El puente no solo lo llevó al pescado; lo llevó al éxito.
La moraleja es clara: la obediencia abre caminos, la disciplina los construye, y la constancia los recorre. Javier no vio el fruto al instante, pero su esfuerzo lo transformó.
Hoy piensa en tu “puente”: esa tarea que requiere seguir un plan, trabajar duro y no rendirte. Cada paso cuenta. Si necesitas apoyo para mantenerte firme, Yo estoy aquí en Fenix Behavioral Health. ¡Empieza hoy y cruza buscando tu grandeza!
Aser Ones, LCSW
(561) 421-4132
Esta construcción es día a día no es fácil es persistente caes pero te levantas con mucha mucha fe