La Semilla que Venció la Sequía: Tu Esperanza Está Viva

Había una vez un anciano llamado Elías, que vivía en una aldea entre colinas grises. Una sequía había marchitado sus campos, y sus manos temblorosas apenas podían sostener la azada. Una mañana, mientras el sol apenas asomaba, Elías encontró una semilla diminuta entre la tierra seca. “¿Para qué plantar si todo muere?”, pensó. Pero algo en su corazón susurró: “Mientras haya vida, hay esperanza”. Con dedos torpes, la sembró y la regó con las pocas gotas que le quedaban.

Pasaron días de polvo y silencio. Los vecinos murmuraban que Elías había perdido la razón. Pero una tarde, un brote verde rompió la tierra, pequeño, frágil, vivo. Elías sonrió, y pronto, con cada amanecer, ese brote creció hasta florecer en una planta que alimentó su fe y, con el tiempo, su mesa. La aldea lo llamó “el milagro de Elías”, pero él sabía: no era magia, era esperanza sembrada en un suelo que aún respiraba.

La teoría de Charles Snyder sobre la esperanza nos dice que no es pasiva; La esperanza es una chispa que se enciende con acción. Mientras tengas aliento, tienes una semilla que plantar. Hoy, en marzo de 2025, mira a tu alrededor: ¿Qué pequeño paso puedes dar? Si necesitas ayuda para encontrarlo, contáctame en Fenix Behavioral Health. Mientras vivas, la esperanza vive contigo.

Aser Ones, LCSW

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